Ir al contenido principal

Absorto

Ensimismado en sus problemas, absorto de la vida que le pasaba a su derredor. Su mirada estaba enfocada al piso; esa actitud demostraba que en su cabeza surcaban miles de ideas, una tras otra o encimándose entre ellas mismas.

Había caminado no sabia cuanto, tampoco era algo que le interesaba. Había caminado porque sus pies se movían, nunca se había detenido y levantado su cabeza; y menos aun había modificado su perspectiva y mirado hacia el cielo.
Nunca se pregunto eso, siempre sus preguntas estaban relacionadas al medio, la duda, el dolor, la tristeza, el resentimiento, el remordimiento, la envidia, la codicia, la ira, la culpa.

No escuchaba a nadie, ni a si mismo parecía. Solo escuchaba a la cabeza, que no era el mismo sino su peor parte.

Un día paso a su lado alguien que le dijo algo que lo retiro de su estado absorto, pero tan solo por unos segundos. Lo que dijo fue: "hermano, no te concedo ni uno, ni tres; te concedo todos los deseos que sepas formular desde tu corazón".
El personaje de esta historia solo pudo darle una respuesta básica: "Cállate y no digas cosas sin sentido. Dices algo así y solo tienes unas sandalias como abrigo para tus pies".
Dijo esto y, luego, prosiguió con su andar.

Nunca supo quien le hablo; ni que le proponía con su decir. Nunca pudo salir de su enfrascado pensamiento, en donde el miedo, el dolor, la culpa, la ira, el resentimiento eran sus cinco paredes estructurales.
Nunca supo que en ese decir, en ese suceder, el no solo no escucho a aquel hombre, sino que tampoco se escucho a si mismo.

Y hoy sigue caminando, con su cabeza baja. Absorto en sus ideas, que nunca fueron suyas pero que lo invadieron y consumieron. Y ya no tiene importancia el día que deje de existir en este mundo, pues solo fue un ente más sin su alma.

- Por fecha 16/03/2012 - 

Matías Hugo Figliola

Comentarios

Entradas más populares de este blog

FRASES XXXXXVI

Calla mi cabeza y escucho el latir de mi corazón. Siento la inhalación y exhalación. Soy parte de este mundo, de la realidad, y no de las ideas - Cuantas veces he sido prisionero de mis ideas; y yo que pensaba que me estaban dando concejos - Estático como poste, sin poder mover ni un musculo. Aparentando que estoy sano y que sirvo. He olvidado que era naturaleza; como el poste, que antes era árbol - Por fecha 14/09/2014 -  Expectativa Cero

Historia verídica

Tenía pocas monedas y las gasto en vino y comida. Tenía pocas poseciones y lo poco que llevaba era lo que le daba calor y cuidado. Tenía poco tiempo de estar en aquel lugar y solo se sentó y relajo. Pareciera que era el fin de sus momentos o que tan solo vivía abandonado de si mismo. Tenía una sonrisa en su cara y esta brillaba por todo su cuerpo. Tenía un solo cuerpo y este era su templo más divino. Tenía calma en su respirar y esta era el motor con cual el corazón latía y vivía. Parecia que se encontraba en un letargo al cual había llegado por estar ausente de si mismo. Y él pensaba, mientras todos lo miraban. Habito mi vida y elijo que crear con ella. Habito mi propio espacio y por ello no ando corriendo de lugar en lugar. Existo en el aqui y ahora y este es mi mejor lugar y con ello me basta para sentirme en gloria. Inhalaba y exhalaba a cada voluntad de su cuerpo y ello era la mismisima confirmación de su existencia. Y el pensaba, mientras todos corrian ¿Que di...

Mejor es

Queriendo estar seguro, me encierro en mi "casa" y miro la inseguridad, a través de mi "ventana", a todo lo que por fuera pasa. Encerrado dentro de mi "casa" temo por mi seguridad. La inseguridad y la seguridad se unen por opuestos; se unen porque dentro mío está el mismo sentimiento de miedo. Ese modo de ver, pensar y sentir la vida en el que todo es peligroso para mi. Así me encierro y me aíslo; así me pongo agresivo y agravio. Así temo y ataco; así no-vivo y muero. Estar encerrado, cuidándome, es estar estático; sin movimiento. La vida tiene por premisa el cambio y el movimiento. Es por ello que cada vez que me encuentro mirando a través de aquella "ventana", me detengo y corrijo. Veo que estoy eligiendo y donde estoy habitando; si mi vida o mi muerte. Mejor estar andando, haciendo y tomando riesgos que estar aislado, estático y con miedo. Mejor es vivir y no estar muerto en vida. Expectativa Cero