Despierto y escucho cosas. Miro a mi derredor y estoy yo, con mis sabanas, mi cama y el piso. Despierto y escucho cosas, aun sin haber nada ni nadie. Despierto o continuo dormido, es una duda que se me presenta y no hay forma de saberlo. ¿Dormido en que, despierto en que?. ¿Dormido en donde, despierto en donde?. Los ruidos que escucho no provienen del afuera, es mi miedo; este miedo que tiene mis años mas todos los años de mis antepasados. Mi miedo que tiene mi conocer y el conocer de mis antepasados, es decir que en una competencia estoy perdido antes de empezar. Pero con el miedo no se compite, me digo como si no hubiese sido mi boca la que lo dijo, ni mi voz la que hubiese sonado. Uno no compite contra eso porque al hacerlo entra en su juego, ese es su modo de tenerme atrapado en su constante ciclo, en el cual quedaron atrapadas tantos miles de otros. Debo atravesar al miedo, seguir por sobre el como tan solo una mala realidad de pared, siendo tan solo una niebla de no-segu