El ser como un es, honesto con uno mismo, puede mantenerlo a uno en una isla, donde este solo o donde hayan algunos que compartan aquel lugar. Uno puede trasladarse a diversas islas y lugares, uno puede convocarse a diversos grupos y ser aceptado amorosamente. Lo que importa, creo en mi sentir, no es ser aceptado por el otro. Lo que importa, y me encuentro reafirmándolo en mi vivir, es ser aceptado por uno mismo; es decir que ser honesto, genuino y valorar lo que uno es, hace, dice, piensa, siente y vive. La soledad existe cuando uno esta sin otra persona al lado, y aun allí uno esta en contacto y consigo mismo. El sentirse solo es lo abrumadoramente devastador. Saberse solo aun rodeado de veinte personas, de risas y reuniones; de tragos y besos y caricias. El sentirse solo es el sonido de la traición a uno mismo. Ese sonido se puede ir acallado, por continuar con esa rutina de ruido, desorientación y negación. O ese sonido se puede escuchar y tomar consciencia de l...