¿Ser feliz, una elección o una posibilidad?.
Suele verse, solemos ver que el ser feliz es solo una posibilidad. Es un momento que se logra por alguna situación externa que da ese estadio.
Se suele pensar que estamos condicionados a ser felices. Que el exterior determina el interior. Que el afuera dictamina que sentir en el adentro.
Repito, como en tantos escritos que he publicado, que estamos adoctrinados a pensar-sentir-ver de esa forma. Estamos con un chip, el cual dice que sentir, que pensar, que decir, en que momento si y en que momento no.
Fuimos manipulados por miedos y adoctrinamientos, los cuales fueron impuestos por determinados individuos o grupos de individuos; aunque sobre ello prefiero no adentrarme ya que respeto las creencias, como también acepto su modo de ver.
En mi experiencia del vivir he aprendido que el ser feliz, como todo lo que uno desee, es una elección. Es una determinación personal, es determinar en la acción lo que uno desea vibrar.
El exterior puede hacer más fácil o difícil la cuestion de elegir, pero que ello no sirva de escusa para no respetarse a uno mismo.
Poco a poco uno va eligiendose en majores circunstancias de la vida. Primero comenzamos en momentos sencillos, y si lo deseamos, podemos ir evolucionando ese elegir para elegirse en todo momento.
Este dilema que planteo está estrechamente vinculado con el de ser responsable de uno mismo, con todo lo que ello conlleva, o desligarse de uno y señalar al afuera -que no es real- culpándolo por las cosas que suceden.
Ser feliz, una elección. Ser feliz, una responsabilidad. Ser feliz, una determinación. Ser feliz, un modo de vivir.
-determinación: determinar en la acción; es hacer en el mismísimo hacer.
Suele verse, solemos ver que el ser feliz es solo una posibilidad. Es un momento que se logra por alguna situación externa que da ese estadio.
Se suele pensar que estamos condicionados a ser felices. Que el exterior determina el interior. Que el afuera dictamina que sentir en el adentro.
Repito, como en tantos escritos que he publicado, que estamos adoctrinados a pensar-sentir-ver de esa forma. Estamos con un chip, el cual dice que sentir, que pensar, que decir, en que momento si y en que momento no.
Fuimos manipulados por miedos y adoctrinamientos, los cuales fueron impuestos por determinados individuos o grupos de individuos; aunque sobre ello prefiero no adentrarme ya que respeto las creencias, como también acepto su modo de ver.
En mi experiencia del vivir he aprendido que el ser feliz, como todo lo que uno desee, es una elección. Es una determinación personal, es determinar en la acción lo que uno desea vibrar.
El exterior puede hacer más fácil o difícil la cuestion de elegir, pero que ello no sirva de escusa para no respetarse a uno mismo.
Poco a poco uno va eligiendose en majores circunstancias de la vida. Primero comenzamos en momentos sencillos, y si lo deseamos, podemos ir evolucionando ese elegir para elegirse en todo momento.
Este dilema que planteo está estrechamente vinculado con el de ser responsable de uno mismo, con todo lo que ello conlleva, o desligarse de uno y señalar al afuera -que no es real- culpándolo por las cosas que suceden.
Ser feliz, una elección. Ser feliz, una responsabilidad. Ser feliz, una determinación. Ser feliz, un modo de vivir.
-determinación: determinar en la acción; es hacer en el mismísimo hacer.
Matías Hugo Figliola
Comentarios