Era una charla de un cristiano con un islamita. Esta charla variaba entre planteos y acusaciones. Cada cual señalaba al otro y acusaba a su religión de inmoral, incoherente y creada por el diablo.
Siguió caminando y vio otra charla.
Era una charla de un judío con un induista. Esta charla variaba entre planteos y acusaciones. Cada cual señalaba al otro y acusaba a su religión de inmoral, incoherente y creada por el diablo.
Se detuvo un segundo para comprender si lo que había sucedido recién había sido un deja vu o no. Miro detenidamente y confirmo que se estaban llevando dos charlas a diferentes distancias, sin saber que era lo que se hablaba en la otra charla.
Se rió, entre comedia y resignación, y retomo su andar.
Se paro junto a dos personas que estaban charlando.
Era una charla de una persona con otra persona. Esta charla variaba entre todos los temas; no tenía timón y ambos dos se sentían a gusto con ese devenir ideas, frases y posturas.
Le llamo la atención y le pregunto de que religión eran.
A los que ambos dos le sonrieron y dijeron que daba igual que religión profesaran. Ellos estaban disfrutando de la conversación con el otro. Que ello era lo que realmente valía en si.
Sin comprender del todo la pregunta mira al hombre que estaba sentado a la derecha y le pregunta "comprendo lo que me explicas, pero yo querría saber como conciben a dios".
Toma aire y lo mira, con paz en su observar. Continua callado unos largos diez segundo y luego asiente como habiendo comprendido algo.
Abre su boca y de ella salen sencillas palabras "concibo yo, tanto como concibe él -señalando al hombre que estaba enfrente- que en este momento tu estas hablando con dios".
Esta respuesta fue mas confusa que la anterior; el argumento de la explicación era de locos. Dentro de su cabeza se cruzo aquella posibilidad, de que fuesen dos locos jugando a ser cuerdos.
A fin de confirmar su teoría le pide que sea mas claro, como era que ellos eran dios.
El hombre lo mira seriamente, sus facciones cambiaron y su dulce sonrisa se retiro para darle paso a una boca seria, la cual pregunto: "¿estas seguro que quieres saber la verdad, mira que sabiéndola ya no puedes jugar con la ignorancia y tampoco puedes jugar a la religión. Deseas que sea mas claro?"
El miedo lo paralizo, lo dejo estanco en su lugar. Como si esta fuese la decisión mas grande de su vida, y la era hasta ese momento aun sin siquiera el saberlo. Trago saliva, pestañeo ya que sus ojos estaban secos de estar mirando sin cesar y contesto que si con un movimiento seco de su cabeza.
Y el hombre contesto, entonces, a la pregunta que le había hecho "Estoy, en este momento, mirándolo a dios. Estamos en este momento rodeados de dios. Estas en este momento sintiendo el vibrar de dios dentro de dios. Estoy conversando con dios y antes de que tu llegaras estaba conversando con dios."
Le toca el antebrazo y le hace un lugar para que se siente; y así lo hizo.
Prosiguió, sin pedir permiso.
"Somos todos lo mismo. Somos todos la totalidad, la unidad. La fe debe habitar en nosotros, el amor debe ser vibrado en nosotros. La devoción debe ser accionada a cada segundo que recordamos que estamos viviendo.
Las religiones perdieron el sentido de orientación. Algunas señalan arriba, otras abajo y otras tantas en miles de direcciones.
La gente que las sigue perdió el sentido de orientación. Algunos trabajan y dan diezmos, otros se castigan por su padre y otros tantos hacen miles de otras cosas, tan denigrantes para ellos como para su dios.
Entre el judío, el cristiano, el islamita y el induista no hay diferencia. Están enfrentados por la religión; es lo que logro crear el ser humano, división de la unidad.
Suena una locura el vernos divididos ya que en realidad somos uno; pero algunos pocos lograron manipular a la gente para que esta manipule a mas y así se esparció convirtiéndose en la peor plaga de todas.
Religión proviene de religar; religar significa volver a unir. Es la misión de los creyentes de dios el re significar el valor de religión y multiplicarlo.
Y con esto ultimo te hago saber que ya no hay vuelta atrás hermano nuestro. Ya sabes la realidad, esa realidad que estabas buscando y no te animabas; esa realidad que tu miedo te decía que era mentira y perdición."
Y con una risa tan fuerte que hasta los pájaros detuvieron su volar, que los perros callaron sus ladridos; que hasta las personas de las otras charlas cesaron sus debates le profirió una palabra, una tan sola.
"Bienvenido"
- Por fecha 31/05/2013 -
Matías Hugo Figliola
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