Agarro su megáfono y gritó sus últimas palabras.
Igualdad, somos todos iguales. No lo podemos ver, estamos inmersos en una película viscosa que hace que veamos al afuera diferente al adentro y debo decirles que no es así
Respeto, porque no debería de haber otra forma de comunicarse. Porque con el respeto se abren todas las puertas y también las personas. Para poder vivir libre se debe encarnar y hacer uso del respeto.
Comunicación, fantástica palabra que significa dos cosas que juntas significan la totalidad. Común acción, hacer algo en común, accionar unido a los otros; quitar las divisiones, vernos como iguales, como hermanos. Comunicar en la acción, ya que no existe otro lugar real para comunicar las cosas. El decir las cosas solo hace vibrar el aire y vibrar los tímpanos; el hacer algo hace vibrar al cuerpo, al ambiente, a los que están cerca y a los que están lejos. Comunicar en la acción dentro de una acción común con un otro, esto se lo puede concebir como hermandad, fraternidad o comunidad.
Libertad, sino limbo de dolor y perdición. Es el único estado en el que el ser humano esta destinado a vivir, siendo libre. Libre en tanto consciente de sus actos, sentimientos y decisiones. El perder la libertad significa que le dimos a un otro el poder de determinar que, como y cuando pensando nosotros que es nuestra elección.
Hermandad - Fraternidad - Comunidad. Palabras diversas que simbolizan sinónimos entre si. Esta concepción del mundo sería como concebir al mundo como un gran parque de juegos, donde los niños (nosotros) nos disponemos a jugar y disfrutar de esa experiencia que se esta viviendo, llamada vida.
Y para cerrar estas últimas palabras digo que todo esto se puede realizar, no es un delirio de mi psicosis ni una alucinación de mis locuras.
Esto es posible, la decisión depende en una última palabra.
Amor.
Si esta palabra nada existe, el limbo reina aquí y allá.
Si el amor uno no se ama, sin amor no hay respeto, sin respeto no existe la libertad del otro ni la propia; prefiero decir cosas falsas para aparentar bien y traicionar. Prefiero obtener posesiones sobre un otro ya que el otro es una competencia y no un hermano.
Prefiero callar lo que siento, hasta que algún día logre olvidar lo que siento y sienta que lo que siento es lo que en verdad siento; pero no se hagan problema, el recuerdo de su verdadero sentir volverá a ustedes y les recordara que no son eso que dicen ni sienten eso que dicen sentir.
El amor es el vinculo divino, por excelencia, para poder vivir la vida en armonía. En amor todos concebimos todo posible, todos concebimos a todos amigos, todos concebimos prescindible algo materia.
Y con esta última palabra, dejo el megáfono en el piso. Poso con su última sonrisa, para llevarse lo mejor de si.
Próximo ruido, el redoblar del tambor...
...Silencio en la sala...
El cuerpo yacía en el piso, un agujero de bala ponía el punto final a su declaración. Y así lo decreto él, con su mano derecha, que era fiel a su mente derecha que nunca concibió que el sufrimiento fuese algo coherente para la humanidad.
Igualdad, somos todos iguales. No lo podemos ver, estamos inmersos en una película viscosa que hace que veamos al afuera diferente al adentro y debo decirles que no es así
Respeto, porque no debería de haber otra forma de comunicarse. Porque con el respeto se abren todas las puertas y también las personas. Para poder vivir libre se debe encarnar y hacer uso del respeto.
Comunicación, fantástica palabra que significa dos cosas que juntas significan la totalidad. Común acción, hacer algo en común, accionar unido a los otros; quitar las divisiones, vernos como iguales, como hermanos. Comunicar en la acción, ya que no existe otro lugar real para comunicar las cosas. El decir las cosas solo hace vibrar el aire y vibrar los tímpanos; el hacer algo hace vibrar al cuerpo, al ambiente, a los que están cerca y a los que están lejos. Comunicar en la acción dentro de una acción común con un otro, esto se lo puede concebir como hermandad, fraternidad o comunidad.
Libertad, sino limbo de dolor y perdición. Es el único estado en el que el ser humano esta destinado a vivir, siendo libre. Libre en tanto consciente de sus actos, sentimientos y decisiones. El perder la libertad significa que le dimos a un otro el poder de determinar que, como y cuando pensando nosotros que es nuestra elección.
Hermandad - Fraternidad - Comunidad. Palabras diversas que simbolizan sinónimos entre si. Esta concepción del mundo sería como concebir al mundo como un gran parque de juegos, donde los niños (nosotros) nos disponemos a jugar y disfrutar de esa experiencia que se esta viviendo, llamada vida.
Y para cerrar estas últimas palabras digo que todo esto se puede realizar, no es un delirio de mi psicosis ni una alucinación de mis locuras.
Esto es posible, la decisión depende en una última palabra.
Amor.
Si esta palabra nada existe, el limbo reina aquí y allá.
Si el amor uno no se ama, sin amor no hay respeto, sin respeto no existe la libertad del otro ni la propia; prefiero decir cosas falsas para aparentar bien y traicionar. Prefiero obtener posesiones sobre un otro ya que el otro es una competencia y no un hermano.
Prefiero callar lo que siento, hasta que algún día logre olvidar lo que siento y sienta que lo que siento es lo que en verdad siento; pero no se hagan problema, el recuerdo de su verdadero sentir volverá a ustedes y les recordara que no son eso que dicen ni sienten eso que dicen sentir.
El amor es el vinculo divino, por excelencia, para poder vivir la vida en armonía. En amor todos concebimos todo posible, todos concebimos a todos amigos, todos concebimos prescindible algo materia.
Y con esta última palabra, dejo el megáfono en el piso. Poso con su última sonrisa, para llevarse lo mejor de si.
Próximo ruido, el redoblar del tambor...
...Silencio en la sala...
El cuerpo yacía en el piso, un agujero de bala ponía el punto final a su declaración. Y así lo decreto él, con su mano derecha, que era fiel a su mente derecha que nunca concibió que el sufrimiento fuese algo coherente para la humanidad.
- Por fecha 27/05/2013 -
Matías Hugo Figliola
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