Las creencias son las trampas que hemos adoptados como bases fundamentales para el funcionar en la vida.
Las creencias son las barreras artificiales que nos delimitan nuestro hacer, conocer, comprender, aceptar, entender, ver y ser.
No es que sean malas en si, es que nosotros nos paramos sobre ellas y eso es lo errado. Es como querer pararse sobre una rama de un árbol que no esta hecha para dar soporte al cuerpo nuestro.
Las creencias sirven para dar posibilidades de indagación y de nuevas búsquedas; no son funcionales cuando queremos pararnos sobre ellas para vivir nuestra vida. No aguantan el peso de la vida, porque no fueron hechas para eso.
El ser humano modifico e hizo a las creencias una base fundamental y funcional de todos los individuos.
Estamos rodeados de ellas, estamos plagados en nuestra mente con ellas. Basamos nuestras ideas en ellas, y por ellas es que nos cerramos y no conocemos nada más de lo que creemos conocer.
No permitimos conocer nada nuevo porque esto atenta contra nuestras creencias y esto, en definitiva, destruye la vida que tenemos. Ahora yo pienso que, si las creencias no son una base real para vivir, la vida que estamos viviendo, en si misma, no es real.
Mantenemos separados a todos porque hay que mantener una privacidad de uno mismo. No permitimos ninguna nueva creencia, ni idea, llegue a nosotros; la vemos como un acto agresivo y que puede destruirnos.
Así seguimos andando en esta creencia que creemos es la vida y tan solo es un transitar sin consciencia por la vida, que es vida realmente.
La diferencia es clara, es visible y percibible.
Cuando tengas una duda en donde estas parado mira a la naturaleza, obsérvala honestamente. Ve lo que ella hace en todas sus formas que la participan y luego observa tu hacer.
Que la respuesta quede en ti mismo; y espero tengas el propio amor para amarte, serte honesto y asistirte al cambio.
Las creencias son las barreras artificiales que nos delimitan nuestro hacer, conocer, comprender, aceptar, entender, ver y ser.
No es que sean malas en si, es que nosotros nos paramos sobre ellas y eso es lo errado. Es como querer pararse sobre una rama de un árbol que no esta hecha para dar soporte al cuerpo nuestro.
Las creencias sirven para dar posibilidades de indagación y de nuevas búsquedas; no son funcionales cuando queremos pararnos sobre ellas para vivir nuestra vida. No aguantan el peso de la vida, porque no fueron hechas para eso.
El ser humano modifico e hizo a las creencias una base fundamental y funcional de todos los individuos.
Estamos rodeados de ellas, estamos plagados en nuestra mente con ellas. Basamos nuestras ideas en ellas, y por ellas es que nos cerramos y no conocemos nada más de lo que creemos conocer.
No permitimos conocer nada nuevo porque esto atenta contra nuestras creencias y esto, en definitiva, destruye la vida que tenemos. Ahora yo pienso que, si las creencias no son una base real para vivir, la vida que estamos viviendo, en si misma, no es real.
Mantenemos separados a todos porque hay que mantener una privacidad de uno mismo. No permitimos ninguna nueva creencia, ni idea, llegue a nosotros; la vemos como un acto agresivo y que puede destruirnos.
Así seguimos andando en esta creencia que creemos es la vida y tan solo es un transitar sin consciencia por la vida, que es vida realmente.
La diferencia es clara, es visible y percibible.
Cuando tengas una duda en donde estas parado mira a la naturaleza, obsérvala honestamente. Ve lo que ella hace en todas sus formas que la participan y luego observa tu hacer.
Que la respuesta quede en ti mismo; y espero tengas el propio amor para amarte, serte honesto y asistirte al cambio.
- Por fecha 08/02/2014 -
Matías Hugo Figliola
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