He dedicado tantas canciones, tantos poemas y tantas frases.
He dado caramelos, chocolates, ropas, flores, perfumes y anillos.
He hecho tanto ruido para ser visto; he hecho tanto mostrarme para ser querido.
Tanto he dado y me he dado cuenta que en todo lo que daba, no me estaba dando yo en ese dar.
Di tanto y nunca me di. Siempre preserve quien era, siempre protegí mi integridad.
Días nublados en mi mente, en mi corazón y en mi ego.
Días de miedos, incertidumbres y dudas.
Días de inseguridades y de desconfianzas
Días que han quedado atrás. Días que ya no me representan.
Hoy me doy en todo lo que doy. Hoy me doy en todo lo que digo y hago.
Hoy muestro quien soy, con mi corazón como señal de paz, amor y libertad.
Hoy me relajo y me permito vivir y experienciar.
Hoy me abro y nada me lastima, y todo me ilumina.
Las dudas han florecido en aceptaciones.
Los miedos han madurado en coraje y valor.
Las recomendaciones del ego, de protección, han evolucionado a vibraciones del corazón, aquel que nunca se confunde; porque si andamos con aquel como guía todo es bello.
Días que cambian y yo que cambio en ellos; me siento parte de la naturaleza, que voy madurando y brotando.
Quito velos. Pongo luz.
Ilumino lo más preciado de mi vida; me ilumino a mi en el transcurso de esta experiencia tan dual. Y a cada rayo de luz la dualidad pasa a ser inexistente, tan solo se ve el espejismo que alguna vez fue.
Hoy, ahora, en este mismísimo instante. Aquí radica mi existencia y toda experiencia es nueva, única e irrepetible.
Vive tu vida con el asombro de un niño, vive tu vida con la efucividad de un cachorro. Vive tu vida abriéndote a la experiencia de vivir.
- Por fecha 30/07/2014 -
Expectativa Cero
Comentarios